Se acerca Navidad pero todavía podemos hacer planes para nuestro negocio de cara a estas épocas finales de año. Aquí te servimos datos demográficos que están cambiando las tendencias y actitudes de los españoles en las cenas de Navidad. ¡Qué aproveche!
Ya no es lo que era
Seguramente, de cuando muchos de nosotros éramos niños recordamos cenas navideñas repletas de gente. Gente que veías una vez al año y te preguntaban cómo iba la escuela. Tíos que traían a sus respectivos hijos con los que comías hasta saciarte. Cada vez menos familias están habituadas a que esta sea su escena navideña.
Hoy en día, no ser padre o madre es una opción socialmente aceptada. Si se tienen hijos se tienen más tarde y rara vez la pareja supera los dos hijos. Esto está cambiando la demografía en muchos aspectos y son parámetros que se estudian para entender el futuro de diferentes sectores profesionales.
Sin embargo, en la hostelería podemos ver ya una tendencia que se incrementa año a año.
Una nueva tendencia
Cada año más familias deciden celebrar la cena de Navidad en cualquier momento cercano al día 24 en un restaurante. Esto que antes tan sólo se hacía con las empresas cada vez es más habitual verlo en familias poco numerosas. Es una realidad, las cenas de Navidad para amigos, empresas y familias pequeñas existen. Las hay más formales y menos pero lo que está claro es que tu restaurante puede ser el lugar donde se celebre uno de estos encuentros navideños.
Es posible que lo que tú le puedas ofrecer a esa familia sea algo difícilmente superable. Una sorpresa que todo el mundo se merece. Así que ya sabes, viste tu local para la ocasión y llena tu congelador.
El menú de Navidad es cada vez más importante para los bares y restaurantes que no estaban acostumbrados a ser un centro donde se celebraran cenas navideñas.
El marisco, más accesible
Las ventas de marisco en Navidad, según los productores de marisco, suponen un 30% de lo que se vende en todo el año. Cocelang, además, ofrece una oferta asequible y adaptada a bares y restaurantes. El marisco de calidad no es necesariamente caro.
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